Brasilia, 17 ago (Prensa Latina) El juez Edson Fachin, del Supremo Tribunal Federal (STF), reconoció hoy que la candidatura del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva a las elecciones de 2018 habría hecho bien a la democracia en Brasil.
Ese año, Fachin fue expulsado del Tribunal Superior Electoral (TSE), que decidió, por seis votos contra uno, impedir que Lula se presentara a los comicios sobre la base de la llamada Ley Ficha Limpia.
Tal disposición hace inelegible por ocho años al candidato que tenga el mandato revocado, renuncie para evitar la anulación o sea condenado por decisión de un órgano colegiado, aunque todavía exista la posibilidad de apelaciones.
«El tiempo ha demostrado que habría hecho bien a la democracia brasileña si la tesis que apoyé en el TSE hubiera prosperado en la Justicia Electoral», aseguró el magistrado durante una conferencia en línea en la apertura del Congreso Brasileño de Derecho Electoral.
Las declaraciones de Fachin afloraron un día después de salir a la luz otra farsa de la operación anticorrupción Lava Jato.
Este domingo, la periodista Mônica Bergamo, del diario Folha de Sao Paulo, reveló que la Policía Federal no encontró ninguna prueba que corrobore la acusación del exministro de Finanzas Antonio Palocci contra el fundador del Partido de los Trabajadores.
Sin embargo, el contenido de la delación fue publicado por el entonces juez Sérgio Moro, seis días antes de la primera ronda de elecciones hace dos años.
«En el juicio en el TSE en el que la candidatura del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva estaba en el orden del día, fui derrotado, pero mantengo la convicción de que no hay democracia sin ruido, sin derechos políticos para nadie. No nos dejemos llevar por el odio», apuntó Fachin.
Sus declaraciones contrastan ahora con sus acciones respecto a los derechos políticos de Lula. Aunque votó en contra de ellos en el TSE, el ministro negó más tarde la solicitud de defensa del expresidente para suspender su inelegibilidad.
Esta decisión incluso contradijo una determinación del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que estableció entonces que el exdirigente obrero debía mantener sus derechos políticos y podía participar en las elecciones como candidato hasta agotarse todos los recursos legales para la defensa.
Para el diputado federal Paulo Teixeira, no es posible cambiar el pasado, pero Fachin puede contribuir a modificar el futuro votando a favor de la petición de hábeas corpus que pide al STF que reconozca la sospecha de parcialidad del exjuez Moro en los procesos contra Lula.